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De “nunca me ha pasado nada” a “curado manejo mejor”: preocupante cultura del autoengaño frente al alcohol en Fiestas Patrias
En el marco de las celebraciones de Fiestas Patrias, la Asociación Pro Consumo Responsable de Bebidas Espirituosas (Aprocor) presentó la nueva versión de la «Radiografía al consumo de bebidas con alcohol en Fiestas Patrias», un estudio encargado a CADEM que cada año busca visibilizar conductas de riesgo y la normalización del consumo irresponsable.
Los resultados de 2025 mostraron una realidad alarmante, ya que entre las excusas más comunes de quienes manejan tras beber prevalecerían según los encuestados (respuestas múltiples): “Nunca me ha pasado nada” (57%); “Se puede en tramos cortos” (47%) y “Curado manejo mejor” (38%).
A esto se suma que, 4 de cada 10 chilenos reconoce tener familiares o amigos que conducen habitualmente bajo los efectos del alcohol, y un 73% cree que los chilenos no temen a los riesgos de subirse al auto de alguien que ha bebido alcohol.
La encuesta también mostró que 9 de cada 10 personas creen que conductores que consumieron bebidas con alcohol no temen a las sanciones legales (31%) o piensan que no les pasará a ellos (58%), aunque en igual proporción (91%) considera que la fiscalización será igual o mayor a la del año pasado.
Además, las personas declaran que los conductores ebrios temen más a la fiscalización de Carabineros (54%) que a la posibilidad de provocar un accidente fatal (20%).
Prevención
Según explicó Juan Pablo Solís de Ovando, presidente de Aprocor, “los datos reflejan una peligrosa indiferencia cultural donde el miedo a la sanción pesa más que la vida humana”.
En esa línea, hizo un llamado a la responsabilidad, enfatizando que “las Fiestas Patrias deben ser un momento de festejo y alegría, pero la normalización de la conducción bajo los efectos del alcohol o las drogas, así como la validación de su consumo en menores, nos obliga a reforzar un mensaje claro: ni una gota para los grupos de riesgo”.
El ministro de Transportes y Telecomunicaciones, Juan Carlos Muñoz, señaló que «estamos a dos semanas de Fiestas Patrias y queremos reiterar que el alcohol, la velocidad y el celular no son compatibles con la conducción. Con el Plan de 18 a 18 del Ministerio y en colaboración con diversas instituciones, estamos fiscalizando con fuerza, pero no basta, no puede haber un carabinero en cada auto».
El ministro añadió que «la decisión está en cada conductor, no beba si va a manejar y no use el celular al volante. Conducir es una gran responsabilidad y frases como ‘curao manejo mejor’ o ‘si me fiscalizan pago el parte’ ponen vidas en riesgo. No son cifras, el año pasado murieron 70 personas en estas fechas, son familias destruidas por decisiones irresponsables y eso es inaceptable”.
Intervención
La autoridades presentaron los hallazgos en una activación realizada en Parque O’Higgins –epicentro de las celebraciones– que incluyó la exhibición de un vehículo siniestrado y el uso de lentes de alcosimulación, en el marco de las campañas #ConductoresNiUnaGota y #MenoresNiUnaGota.
Al respecto, el alcalde de Santiago, Mario Desbordes, recalcó que «El Parque O’Higgins es el corazón de nuestras celebraciones y también debe serlo del cuidado y la responsabilidad. Estamos reforzando la seguridad y la fiscalización, pero la decisión más importante está en cada persona: si va a beber, no maneje. Queremos que las familias disfruten nuestras tradiciones con alegría, pero también con responsabilidad y respeto por la vida.”
El estudio también reveló un cambio preocupante en la percepción social: 6 de cada 10 chilenos cree que el porcentaje de conductores que conducen bajo los efectos de las drogas es mayor que quienes lo hacen bajo los efectos del alcohol.
De la tradición al riesgo: percepciones que preocupan
El estudio expone cómo ciertas prácticas culturales siguen validando conductas de riesgo: 4 de cada 10 chilenos considera aceptable ofrecer un “terremoto sin alcohol” a menores como forma de integrarlos a la tradición, lo que refleja una peligrosa normalización del consumo desde edades tempranas.
En cuanto a la percepción social, los encuestados asocian a los conductores ebrios con actitudes como negar que ha tomado y darse a la fuga. Un 15% reconoce conocer a alguna embarazada que bebió durante Fiestas Patrias, lo que confirma la persistencia de creencias instaladas como que “una copa no hace daño” (51%) o que “menos grados, menos riesgo” (35%).
En términos de autocuidado, el 59% de los entrevistados cree que los chilenos estarían muy o algo dispuestos de asumir el rol de conductor designado, mientras el 41% piensa que no hay disposición para ello. En tanto, un 88% declara que haría todo lo posible por evitar que un familiar o amigo maneje tras beber.
Las personas consultadas sobre las medidas que el próximo Gobierno podría impulsar, ven con mayor efectividad la incorporación de educación temprana (desde 5o básico) sobre consumo de alcohol en las escuelas, además de endurecer sanciones a quienes venden a menores. El estudio completo se encuentra disponible en www.aprocor.cl.