Regional
Justicia acoge recurso de protección INDH por vulneraciones a DDHH de copiapinos
La Corte de Apelaciones de
Copiapó acogió un recurso de protección interpuesto por la Sede regional
Atacama del Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH), luego de que ésta
recibiera numerosas denuncias de alumnos/as, apoderados/as, directivos/as,
docentes, y vecinos/as de varios establecimientos educacionales públicos de la
comuna de Copiapó, que daban cuenta de permanentes eventos de emanaciones de
gases que ocurrían tanto al interior de los mismos como en los alrededores.
En su fallo la Corte estableció que “se ha demostrado que como consecuencia del
evento climático que afectó a la Región de Atacama el año 2015, y especialmente
a la ciudad de Copiapó, varios sectores de la ciudad evidenciaron presencia de
gas sulfhídrico en la infraestructura sanitaria interior de los inmuebles en
que se emplazan determinados recintos educacionales, vulnerándose por omisión
los derechos constitucionales a la vida y la integridad física y psíquica, la
igualdad ante la ley, el derecho a vivir en un medioambiente libre de
contaminación, el derecho a la libertad de enseñanza y el derecho a la
educación, de los habitantes de esta comuna que conforman las comunidades
educativas de los establecimientos mencionados en el recurso”, entre ellos el
Liceo El Palomar, Escuela Las Brisas, Escuela Jesús Fernández Hidalgo, y varios
jardines infantiles.
La Corte de Apelaciones determinó que corresponde a la Municipalidad de Copiapó
proseguir con las medidas preventivas, correctivas y de coordinación con los
demás servicios públicos, a fin de salvar los riesgos para la salud de las
personas, evitando daños al medioambiente y velando por el acceso a un proceso
educativo de carácter continuo de los niños, niñas y adolescentes que forman
parte de dichos recintos educacionales.
Además, le ordenó proseguir con las obras materiales que sean necesarias para
“solucionar definitivamente el problema asociado, esto es, minimizando el
riesgo de intoxicación por gases, en especial el ácido sulfhídrico”.
Por último, se estableció que corresponde a la Superintendencia de Servicios
Sanitarios velar por el íntegro y adecuado cumplimiento de lo decretado, lo que
deberá concretarse en un plazo máximo de tres meses.
Como consecuencias de las permanentes emanaciones de gases, los colegios
afectados debieron adoptar una serie de medidas que afectaron el adecuado
desempeño de la actividad educativa de los niños, niñas y adolescentes que
concurren a ellos, alterando además a la comunidad educativa en su conjunto.
Se produjeron así suspensiones de clases, términos anticipados de la jornada
diaria, implementación de horarios de ingreso y de término de jornada,
repartición de colaciones frías, tomas de establecimientos educacionales por
parte de alumnos y apoderados, marchas por las calles céntricas de la ciudad, y
derivaciones a los servicios de urgencia de distintos centros asistenciales de
la comuna.
Críticos fueron los episodios de emanaciones ocurridos en agosto y
septiembre de 2018, los cuales afectaron a siete establecimientos
educacionales, dejando alumnos/as y funcionarios/as intoxicados y
recibiendo atención médica, además de la suspensión de las clases.